Iruña recuerda a las víctimas

17/04/2016
Cientos de personas recordaron ayer a los fusilados en Iruñea tras la sublevación fascista de 1936 en un acto en el que los familiares de las víctimas estuvieron arropados por representantes del Gobierno navarro. La demanda de justicia fue la principal reivindicación.
 
GARA.- 2016.04.17
0417_eh_castillo

La vuelta del Castillo, junto a la placa que recuerda a las víctimas, fue el escenario del acto, celebrado por décimo año, en el que la música y el teatro apoyaron los testimonios y las reivindicaciones y en el que no faltó una ofrenda floral.

Al contrario que en ediciones anteriores, hubo una importante representación institucional, con la asistencia de la presidenta Uxue Barkos, la consejera de Relaciones Ciudadanas e Institucionales, Ana Ollo, y el director general de Paz, Convivencia y Derechos Humanos, Álvaro Baraibar Etxeberria. Bar- kos –quien a la tarde asistió al descubrimiento de una placa en homenaje a todos los fusilados en Peralta en 1936 junto a la presidenta de la Cámara navarra, Ainhoa Aznarez– abogó por «mantener firme la memoria para que momentos como estos no se vuelvan a vivir».

Su presencia, así como la de cargos electos de UPN como Enrique Maya y María Caballero, fue puesta en valor por miembros de la Asociación de Familiares de Fusilados de Navarra, que destacaron igualmente la participación de representantes de todos los partidos parlamentarios, excepto el PP.

«¡Qué mejor momento para que todas las fuerzas políticas estén aquí!», sostuvo al respecto la presidenta de la asociación, Olga Alcega, quien añadió que también le hubiese gustado que «estuviese la Iglesia, porque directa o indirectamente fue partícipe de estos hechos», por lo que «todavía falta», apostilló.

Alcega remarcó que «no importan las ideologías» cada uno tiene la suya, pero aquí, insistió, «se está hablando de los derechos de unas víctimas» y de denunciar unas muertes «injustas, ya que no hay que matar a nadie por ningún tipo de ideología».

En su intervención en el acto, la presidenta de AFFNA recordó que los pilares de la memoria histórica son «verdad, justicia y reparación» y si falla cualquiera de ellos «nunca se producirá la verdadera cura de un dolor que no tiene mejoría por muchos años hayan pasado».

Una vez que el actual Gobierno navarro ha asumido una tarea que ellos venían realizando como son las exhumaciones, ahora se tienen que centrar en otro pilar que es la justicia. Así manifestó que han ido a la Audiencia Nacional, a la querella Argentina y desde hace dos meses están poniendo denuncias en la comisaría de la Policía Foral de Iruñea, tras lo que mostró el apoyo de la asociación a los hijos, nietos y sobrinos de las víctimas que decidan seguir este camino.

«Algún día habrá un juez valiente, que interprete que los delitos de lesa humanidad no prescriben, que las desapariciones forzadas hay que investigarlas, que ya sabemos que no van a volver, que ya sabemos que murieron, pero que investiguen donde están, que saquen los archivos de la Guardia Civil, que digan quién los asesinó», apuntó, tras lo que concluyó que lo que quieren es que «se haga justicia. Nunca más y para nadie esos horrores».

Duros testimonios

Previamente, Joaquín Arroyo, hijo y nieto de dos hermanos que fueron fusilados, Agustín y José María Arroyo, relató sus vivencias como un niño que iba a cumplir 5 años en aquel momento. «Los gestores de la voraz e insatisfecha derecha, nunca han entendido, ni quieren comprender, que tras ochenta años de angustiosa y tortuosa esperanza, ya es hora de que por lo menos intentemos saber y sepamos dónde reposan, simple- mente cubiertos de tierra, los cuerpos de nuestros seres queridos, y poder darles un definitivo y digno asentamiento», subrayó en su intervención.

En la ofrenda floral en la vuelta del Castillo participaron, además de los miembros del Gobierno, cargos electos de Geroa Bai, Podemos, PSN e I-E y el secretario general de UGT, entre otras personas.