Avanzando en la búqueda de la verdad
Piden al Gobierno de Navarra un censo de verdugos franquistas
La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) espera que el Gobierno de Navarra, una vez que se ha conocido el estudio sobre las víctimas de la represión franquista del Fondo Documental de la Memoria Histórica en Navarra, encargue un estudio oficial para llevar a cabo un censo de los verdugos y colaboradores de la represión. El colectivo considera que no se puede utilizar la palabra verdad en políticas de memoria si sólo se habla de las víctimas y quedan fuera de los márgenes los verdugos.
La ARMH denuncia que el proyecto de ley de memoria democrática del Gobierno central peca del mismo sesgo al hablar de un censo de víctimas y no añadir la realización de uno de verdugos. “Estas políticas perpetúan los acuerdos tomados por las élites de algunos partidos en la transición que tuvieron en cuenta a las víctimas, ni los crímenes y que les garantizaron a los verdugos el disfrute de una sólida impunidad”, explica Emilio Silva, presidente de la ARMH. Y añade que “para hablar de la verdad con mayúsculas hay que contextualizar la violencia, hablar de crímenes, hablar de las víctimas de esos crímenes, por supuesto, y hablar de los criminales y señalar quiénes fueron”.
Es necesario que desde un organismo oficial como el Gobierno de Navarra se cuente de lo que fue capaz el fascismo Navarro, de cuánta violencia ejerció contra la población, del precio que pagaron sus víctimas y de los beneficios que los golpistas y los verdugos obtuvieron con la aplicación de tanta violencia.
Silva, que nació en Elizondo y es nieto de la primera víctimas de la represión franquista identificada por una prueba de ADN, exhumada en el Bierzo, afirma que “no se puede hacer una política dirigida exclusivamente a las víctimas porque se las puede estar utilizando para esconder a los verdugos y la sociedad tiene derecho a saber quiénes fueron los responsables de todas esas muertes, de todas esas violaciones, de todas esas apropiaciones de bienes a punta de pistola”.